Jonathan Swift y la Mentira

Hola a todos. El otro día en clase leímos  un fragmento de una obra llamada Los Viajes de Gulliver. El autor, Jonathan Swift, fue un escritor satírico irlandés. Su obra más importante es la que os he mencionado y es una de las críticas más amargas pero a la vez satíricas que se han escrito en contra de la sociedad y de la condición humana.

Jonathan Swift fue educado por su tío ya que su padre falleció antes de su nacimiento y su niñez la vivió en medio de la pobreza. Después de terminar sus estudios en el Trinity College se le presentó la oportunidad de trabajar como secretario del político William Temple. La confianza que William depositó en su secretario fue creciendo y Jonathan llegó a conocer asuntos de gran importancia y fue presentado al rey Guillermo III. A pesar de esto este trabajo acabó por aburrirle y como vio que Temple no tenía prisa por promocionarle decidió ingresar en la Iglesia. Si quieres saber más acerca de la vida de este gran autor haz click aquí.

Vamos a pasar ahora a hablar acerca de su obra más famosa: Los Viajes de Gulliver. Esta obra es a la vez una sátira sobre la naturaleza humana y el subgénero literario de los "relatos de viajes". La obra es un clásico de la literatura en inglés y es también considerada un clásico de la literatura universal. En el primer fragmento que vimos en clase el protagonista, que había llegado a una isla donde las personas eran más pequeñas, tenía que firmar una especie de contrato con estos seres en el que éstos se aprovechaban de él. Gulliver tenía que defender a estos pequeños seres, actuar como mensajero y ayudar a los ciudadanos a cambio de comida. En el segundo fragmento el protagonista llegaba a una isla donde los caballos, houyhnhms, hablaban y eran superiores a los seres humanos, yahoos. En este texto se habla de la mentira y se critica la esclavitud, falta de libertad, y la explotación para aprovecharse de los más débiles.

La Mentira y la Explotación

En esta sociedad del primer mundo en la que vivimos donde se protege al hombre por encima de todo, con una legislación que cuidad de su integridad física y psíquica, donde se reconocen unos derechos desde el momento de nacer, e incluso antes, donde se cuida el medio ambiente en el que vivimos y nuestro desarrollo como personas... Qué sitio se deja para conocer y pelear por aquellas personas fuera de nuestras fronteras que viven sin los más elementares derechos , que no tiene acceso a comida, agua, educación. Disfrutamos de tiendas que nos ofrecen camisetas baratas que usamos un poco y luego tiramos, pero... qué hay o quién hay detrás de esos productos que a nosotros nos parecen "gangas" ¿Lo sabemos?¿O quizás, no lo queremos saber? Nos justificamos y nos mentimos pensando que la gente que trabaja en  condiciones indignas, tampoco conocen otra cosa, "bastante que trabajan". Pero no nos interesa saber como nosotros, el primer mundo, con nuestra manera de consumir y actuar, provocamos que esta gente esté siendo explotada y maltratada. Nos creamos mentiras para poder vivir justificando la explotación de otros, y exculpándonos de cualquier responsabilidad. Responsabilizamos a sus gobiernos y a su manera de ser como sociedades primitivas, de lo que nosotros hacemos mal. La explotación de estas personas son, el confort de nuestra cómoda sociedad. Y justificando esas injusticias con mentiras, acallamos nuestra conciencia acomodada.

Todos mentimos y ocultamos cosas constantemente, o para proteger un secreto (personal o no) o para sacar beneficio de cualquier tipo. Muchas veces nos las preparamos, ensayamos nuestras mentiras, sabiendo que nuestra conducta no ha sido del todo correcta y que necesitamos una manera para encubrirla. No solo mentimos a los demás sino que también nos mentimos a nosotros mismos para convencernos de que somos de una manera u otra. A veces nos convencemos de que somos mejores de lo que somos en realidad, mientras que otras nos convencemos de que no somos tan buenos como somos y nos ponemos por los suelos nosotros solos.